lunes, diciembre 11, 2006

Esas palabras...

Hay palabras, situaciones, que nunca se deben decir y nunca deben pasar, pero estas se dicen y esas pasan, y todo por un momento de exaltación y delirio, combinado con un poco de cólera y locura… Que voy a hacer con estas cosas ya dichas y con esas situaciones que no se pueden recuperar. Vaya que cada segundo cuenta en esta vida, porque lo que me está tardando escribir esto, la primera palabra escrita ya es historia… Por eso, siempre hay que razonar un poco antes de decir cosas que causen situaciones que no puedas borrar, porque eso queda escrito en la línea llamada tiempo, esa línea que siempre está ahí, y que nunca cambia. Solo nosotros cambiamos nada más. Ese ciclo de vida, es solo una porción de tiempo, un breve momento en esa línea.

Me imagino el tiempo como una gran hoja, inmensa, capaz de aguantar cualquier tipo de letra, cualquier tipo de herramienta para escribir en ella. Pero sin un borrador, ni un corrector, para compensar lo que hacemos o decimos; porque podríamos tachar pasar cosas por encima, pero siempre habrá alguien que diga, aquí hubo algo escrito y de seguro no era bueno, se equivocó, porque está tachado…Vaya noche aquella, difícil de olvidar, quedará grabada, escrita con mi letra y puño en tú hoja y en la mía. Triste lo sé, ya es historia y no lo puedo recuperar.

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